miércoles, 21 de enero de 2009

Aprendiendo con Mozart

El efecto Mozart es una teoría según la cual los individuos que escuchen la música de Wolfgang Amadeus Mozart podrán mejorar el intelecto, o al menos algunos componentes de la función intelectual. El término fue acuñado por el Dr. Alfred. A. Tomatis (1991), quién utilizó la música de ese compositor como estímulo en su trabajo para intentar curar una variedad de trastornos.
Él considera que la calma de esa música presentada en diferentes frecuencias ayuda al oído, y promueve la curación y el desarrollo del cerebro.
En Uruguay hay escuelas que llevan a cabo Proyectos Institucionales basados en la música, más específicamente en el “Efecto Mozart”.


Este video es un documental que nos muestra cómo reacciona nuestro cuerpo con la música de Mozart y también vemos algunas de las actividades que se pueden realizar con sus composiciones.


www.Tu.tv


Como la música tiene efectos diferentes en distintas personas, algunos investigadores siguen poniendo a prueba si el efecto Mozart es real y si cualquier otra pieza tiene el mismo efecto.
Lo que no podemos poner en duda es que ésta y otras músicas sirven para despertar la creatividad, aumentar la concentración, disminuir el estrés y afinar el sentido auditivo.


La música es una especie de medicina que se debe de administrar en dosis (Gioachino Rossini)

Deshumanización

En la sociedad de hoy el proceso de deshumanización es cada vez mas preocupante

Cuando este sucede, nos convertimos en estatuas. Poco a poco vamos haciéndonos inmóviles. Perdemos nuestro poder de razonar y nos convetimos en víctimas de la perdida de identidad.

¿ Si no usamos la razon, en que nos diferenciamos de las estatuas?

Mujer y trabajo


La mujer aún tiene muchas peleas en las que luchar. Tristemente, la realidad supera cualquier ficción que podamos imaginar. Tristemente, a muchas mujeres se les va la vida mientras trabajan, mientras vuelven a sus hogares, mientras intentan llevar una vida en la que la dignidad,
¡LES ESTÁ TAN POCO PERMITIDA¡


lunes, 5 de enero de 2009

Guerreros del Arco Iris

Hubo alguna vez una anciana llamada Ojos de Fuego, nacida india de la tribu Cree de norteamérica. Esta mujer, lanzó una profecía que se hace eco hoy en día y que dice así:
Llegará el día en que la codicia del hombre blanco, del Yo-ne-gi, hará que los peces mueran en las corrientes de los ríos, que las aves caigan de los cielos, que las aguas ennegrezcan y los árboles ya no puedan tenerse en pie.
Y la humanidad, como la conozco, dejará de existir.
Llegará un día en que la Tierra caiga enferma, pero cuando no queden apenas esperanzas, algunas personas despertarán de su letargo.
Llegará un día en el que muchas personas se levantarán para formar un mundo nuevo de respeto por el Gran Espíritu de la Tierra.
Llegará el tiempo en que habremos de necesitar a "los que preservan las tradiciones, las leyendas, los rituales, los mitos y todas las viejas costumbres de los pueblos" para que ellos nos muestren cómo recuperar la salud, la armonía y el respeto a nuestros semejantes. Ellos serán la clave para la supervivencia de la humanidad, y serán conocidos como "Los Guerreros del Arco Iris".
Estos Guerreros del Arco Iris proporcionarán a la gente los principios y reglas para hacer una vida acorde con el mundo. Estos principios serán los mismos principios que seguían los pueblos del pasado. Los Guerreros del Arco Iris le enseñarán a la gente los viejos hábitos de la unidad, del amor y de la comprensión.
Y enseñarán por los cinco rincones de la Tierra cómo alcanzar la armonía entre las personas. Le enseñarán a la gente cómo orar al Gran Espíritu de la misma manera como lo hacían los pueblos del pasado, dejando que el amor fluya como las hermosas corrientes que descienden de las montañas, por cauces que las llevan a unirse con el océano mismo de la vida.
Y una vez más renacerá la alegría de estar en compañía, como también en la soledad. Estarán libres de envidias mezquinas, y amarán a sus semejantes como a sus hermanos, sin importar el color de su piel, su raza o su religión. Sentirán cómo la felicidad inunda sus corazones mientras se vuelven cada uno con el resto de la creación. Sus corazones serán puros e irradiarán calidez, comprensión y respeto por la humanidad, por la naturaleza y por el Gran Espíritu.
Y sus hijos nuevamente podrán correr libres y disfrutar los tesoros de la Naturaleza y de la Madre Tierra, libres de venenos y de la destrucción generada por el Yo-ne-gi y sus prácticas codiciosas.
Los ríos fluirán limpios otra vez, los bosques serán abundantes y llenos de hermosura, y otra vez habrá aves y animales sin número. Nuevamente se respetarán los poderes del planeta y de los animales, y la conservación de todas las cosas bellas se convertirá en una forma de vivir.
Los líderes de los pueblos volverán a ser elegidos a la vieja usanza... no por el grupo político al que pertenezcan, ni porque griten más fuerte o presuman más, tampoco por un proceso de intercambio de insultos o acusaciones mutuas; serán elegidos aquellos cuyas acciones digan más que sus palabras. Serán elegidos como líderes o Jefes aquellos que den muestras de su amor, su sabiduría y su valor, que hayan sido capaces de actuar por el bien de todos. Serán elegidos por sus cualidades, no por la cantidad de dinero que posean. Y al igual que los Jefes devotos y considerados de la antigüedad, usarán su amor para entender a la gente y para asegurarse de que sus niños y jóvenes sean educados en el amor, en el trabajo y en el conocimiento de su entorno. Les mostrarán que los milagros pueden hacerse realidad para curar a este mundo de todos sus males, devolverle la salud y la belleza que antes tuvo.
Las tareas que les esperan a los Guerreros del Arco Iris serán muchas y mayúsculas.
Habrá enormes montañas de ignorancia que será necesario vencer; se enfrentarán contra prejuicios y odio. Tendrán que ser dedicados, firmes en su fortaleza y tenaces de corazón. Porque en su camino hallarán mentes y corazones dispuestos a seguirlos en esta senda que le devolverá a la Madre Tierra toda su belleza y su plenitud. Ese día llegará pronto, ya no está lejos. Llegará el día en que nos demos cuenta de que todo lo que somos, nuestra existencia misma, se la debemos a las gentes que han reservado su cultura y su herencia, a esas personas que han mantenido con vida los rituales, las historias, las leyendas y los mitos. Y será gracias a este conocimiento que ellos han preservado, como volveremos a estar otra vez en armonía con la Naturaleza, con la Madre Tierra y con la humanidad misma. Y descubriremos que este conocimiento es nuestra clave para la supervivencia. Éstos serán los Guerreros del Arco iris, y ésta es la razón que me impulsa a proteger la cultura, la herencia y los conocimientos de mis antepasados.

Su sabiduría permanece inalterable, al alcance de quien la quiera encontrar; una sabiduría que más que nunca, es urgente
Nosotros tenemos la oportunidad de construir un puente Arco Iris hacia la edad de oro. Para hacer eso, debemos hacerlo juntos con todos los colores del Arco Iris, con todos los pueblos del mundo. Nosotros que estamos viviendo sobre la Tierra hoy día, somos los Guerreros del Arco Iris que enfrentaremos el desafío de construir ese puente.

viernes, 2 de enero de 2009

Aprender mecanografía puede ser útil mientras visitas el blog, con el fin de solucionar los frecuentes problemas que el teclado suele dar

habilidades comunicativas

La sociedad, en ocasiones nos da o nos niega, nos hace estar dentro o nos margina.
La forma en que nos tratan y en la que tratamos, influye directamente en cómo vemos en mundo y en cómo serán nuestras futuras relaciones. Creo que es necesario establecer una tertulia en torno a ciertas rutinas que realizamos día a día y que, en ocasiones, pueden no ser demasiado justas para nosotras y hacer que nuestros hábitos relacionales no sean todo los buenos que podrían llegar a ser. Creo que este es un buen momento para enviar un comentario con el fin de elaborar un listado y decidir qué nos parece justo y qué no.
Posteriormente, podríamos realizar un teatro en el que se pongan de manifiesto diferentes posturas en torno a un mismo tema.